Cuando hablamos de ciclos, nos referimos a esos procesos de la vida que comienzan, se desarrollan y concluyen. Sin embargo, cerrar ciclos no es solo un acto simbólico; tiene un impacto profundo en nuestra capacidad para avanzar.
Cerrar ciclos implica más que simplemente poner fin a una etapa; es un proceso que impulsa el crecimiento personal al liberarnos de lo que ya no nos sirve. A menudo, nos encontramos en situaciones donde persistimos en algo que no se materializa o buscamos algo que quizás no sea para nosotros. Aquí es donde cerrar ciclos se vuelve crucial.
Es esencial diferenciar entre el cierre de ciclos y las pérdidas. El cierre de un ciclo comprende pérdidas, pero estas no siempre llevan consigo un dolor súbito y profundo. Más bien, se trata de dejar en el pasado momentos que han llegado a su fin para permitirnos avanzar.
¿Cómo cerrar ciclos impacta en el futuro?
El cierre de un ciclo no es solo un acto retrospectivo; tiene consecuencias directas en nuestro futuro. Si dejamos ciclos abiertos, obstaculizamos nuestro progreso personal. Es como dejar una llave goteando sin reparar, esperando que no afecte el costo económico y ecológico del agua.
Aquí te propongo algunos caminos para cerrar ciclos:
Reconocer y aceptar
- Identificar que un ciclo ha llegado a su fin puede requerir una combinación de reflexión, observación y autoconocimiento. Algunas señales sobre el fin de un ciclo pueden ser: falta de progreso significativo, sentimiento de estancamiento, cambio de prioridades, pérdida de interés o pasión por lo que estás haciendo, cambios externos que nos generan poco bienestar como pensamientos negativos, ansiedad o insatisfacción, podrían ser un indicativo de que es hora de buscar nuevas oportunidades.
- Podemos preguntarnos “¿cuáles son las pérdidas asociadas a este ciclo?” y registrar tus sentimientos y observa patrones sobre situaciones vividas. Reconocer es el primer paso para aceptar.
Cerrar ciclos y dejar ir
- Libérate emocionalmente de lo que ya no está presente. Aprende técnicas como el mindfulness para vivir el momento presente y soltar las ataduras del pasado.
- También puedes realizar acciones que representen dejar ir, como escribir y luego destruir lo que deseas soltar.
- Permite que nuevas oportunidades encuentren espacio.
Aprendizaje y reflexión
- Reflexiona sobre lo que has aprendido. ¿Qué lecciones he aprendido de este ciclo? Lleva un diario de lecciones aprendidas. Registra las experiencias y cómo te han moldeado.
- Aplica esas lecciones en tu crecimiento futuro. ¿Cómo puedo aplicar esas lecciones en mi crecimiento futuro? Consulta con un mentor. Hablar con alguien que haya pasado por experiencias similares puede proporcionar perspectivas valiosas.
Desbloquear el progreso personal
- Identifica creencias limitantes. Reconoce pensamientos que te impiden avanzar y trabaja en cambiarlos.
- Abraza el cambio y la adaptabilidad.
- Establece metas realistas. Divide grandes objetivos en pasos manejables para evitar sentirte abrumado.
Cerrar ciclos es un acto de autocuidado y autodescubrimiento. Al liberarnos de las cargas emocionales y aprender de las experiencias, creamos un espacio propicio para el crecimiento personal.
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